lunes, 25 de enero de 2010

No volveré a ser joven

Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.

Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos-
envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.

Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.


Jaime Gil de Biedma del libro "Poemas póstumos"

2 comentarios:

TrasTera dijo...

Este poema deja la piel del alma del gallina, como canta sabina. Para guardar entre los favoritos.

Un saludo!

NoeMi dijo...

No se trata tanto de ser vólver a ser joven, si no de no dejar de serlo.....